El 11 de septiembre de 2001, un grupo de terroristas de Al Qaeda, liderado por Osama Bin Laden, burló la seguridad de Estados Unidos y mató a cerca de 3.000 personas en una serie de ataques con aviones comerciales secuestrados convertidos en instrumentos suicidas.
Estos hechos marcaron un antes y un después no solo en La unión americana, sino también en el resto del planeta.
Como cada año, cientos de personas rinden homenaje a las víctimas en Nueva York.
¿Qué pasó el 11-S?
A las 8:46 de la mañana, el vuelo 11 de American Airlines, un Boeing 767 que se dirigía de Boston a Los Ángeles con 92 personas a bordo, incluidos cinco yihadistas, impactó a 790 km/h contra la torre norte del World Trade Center, compuesto por las conocidas como Torres Gemelas.
Minutos después, a las 9:03, el vuelo 175 de United Airlines, también un Boeing 767 pero con 65 personas a bordo, en el que estaban incluidos otros cinco yihadistas, se estrelló a 950 km/h contra los pisos superiores de la torre sur.
A las 9:37 se vive un nuevo ataque: el vuelo 77 de American Airlines con 64 personas a bordo, que había despegado del aeropuerto Washington-Dulles, en Virginia, choca contra la fachada oeste del Pentágono tras ser secuestrado por terroristas.
Minutos después, las torres, ícono de ‘skyline’ de Nueva York, se derrumban y dejan una cifra histórica de muertos que cambió por completo la seguridad aeronáutica y la presencia de Estados Unidos en el Medio Oriente.