Producto de la guerra contra la extorsión que ha sido declarada por la Dirección Policial Anti Maras y Pandillas Contra el Crimen Organizado, se continúan desarrollando fuertes operaciones en todo el país con el objetivo de darle captura a miembros activos de organizaciones crimínales implicados en este ilícito.
Las operaciones se han centralizado en las zonas con mayor incidencia, resultado de ello en el municipio de El Paraiso al oriente del país, los investigadores de la DIPAMPCO han logrado concretar la captura de un miembro activo de una banda criminal independiente quien según las investigaciones era el responsable de venir generando de forma indiscriminada el cobro de extorsión en los sectores de El Paraiso, Danli, Jacaleapa, Yuscaran, Moroceli y Ojo de Agua.
El capturado fue identificado como Angel Noel Valle Zelaya de 40 años quien es conocido en el mundo criminal con el alias de Turunca a quien los investigadores le han decomisado dinero en efectivo proveniente del cobro de extorsión, sos teléfonos celulares los cuales se presume utilizaba para coordinar sus actividades ilícitas y un vehículo tipo pick-up color blanco.
Los agentes que han participado en esta operación han dado a conocer que alias Turunca ya había cobrado una suma superior al millón de lempiras por concepto de extorsión y al momento de ser aprehendido se disponía a recoger más de 400 mil lempiras los cuales les venía exigiendo a las víctimas de la zona.
Es importante mencionar que a este individuo se le vincula con el cobro de extorsión del cual venían siendo víctimas varios comerciantes, transportistas y empresarios de la zona, sin embargo muchos no habían logrado establecer la denuncia por lo que se presume que este individuo ya había recolectado varios millones de lempiras por concepto de extorsión en el departamento de El Paraíso.
Los investigadores de la DIPAMPCO dieron a conocer que alias Turunca ejercía las amenazas e intimidaciones a través de mensajes de texto por Whassapp, exigiendo a sus víctimas que le enviaran fotos de los montos de dinero que les exigía por concepto de extorsión, como evidencia que concretarían el pago.
Varios elementos incluyendo los anteriormente descritos hacen entrever a los investigadores que este individuo era muy planificado para cometer este ilícito y que tendría mucha experiencia sobre la comisión del mismo, por lo que se investiga si ha tenido nexos con organizaciones crimínales tradicionales a quienes se les atribuye el cobro de extorsión como una de sus principales actividades delictivas.
