El Congreso Nacional aprobó la reforma al contrato de fideicomiso para la generación de energía y desarrollo de proyectos públicos para control de inundaciones, mitigación de los efectos del cambio climático, mediante la constitución de una alianza público-privada.
El contrato está suscrito entre la República de Honduras actuando a través de la Secretaría de Estado en el despacho de Finanzas, la Empresa Nacional de Energía Eléctrica y banco Atlántida.
Y tiene la finalidad de administrar los bienes y derechos que sean aportados por los fideicomitentes presentes y futuros, y destinar los mismos para materializar el desarrollo de proyectos de generación de energía eléctrica o no, que a criterio del Comité Técnico sean de interés y beneficio para el Estado de Honduras, pudiendo en dichos proyectos considerarse beneficios adicionales a la generación de energía, siempre en beneficio del Estado de Honduras.
El decreto también contempla lo necesario que es contar con la infraestructura que prevenga nuevas inundaciones y desastres naturales mediante la construcción de represas que generen o no energía eléctrica.
Además, el territorio hondureño fue fuertemente azotado por los fenómenos tropicales denominados ETA e IOTA, dejando a su paso grandes cantidades de lluvia a nivel nacional, lo cual ocasionó graves daños a la infraestructura vial y al sector agrícola del país, así como afectaciones directas a los pobladores en las zonas altamente vulnerable.
