Científicos estadounidenses han demostrado que el consumo de grandes cantidades de sal está asociado con el incremento del riesgo de sufrir una muerte prematura, según indica un estudio que ha aparecido en International Journal of Epidemiology.
Esa investigación concluye que existe una relación directa entre la cantidad de sal consumida y el riesgo de fallecimiento temprano debido a que, dentro de un rango entre 9.000 y 1.200 miligramos de cloruro de sodio diarios, el nivel más bajo de ingesta fue el más seguro.
En esa investigación estuvieron involucradas 2.744 personas entre 30 y 54 años que padecían un ligero aumento de la presión arterial y estuvieron bajo seguimiento durante 24 años, un periodo en el que murieron 272 participantes.
La cantidad de sal consumida por los voluntarios se determinó mediante diversos métodos, incluidas muestras de orina en diferentes momentos del día.
