La sátira que caracteriza la “Middletown’s Hummer’s Parade”, en Delaware, esta vez se pasó de la raya.
En eso coinciden desde usuarios de redes hasta políticos.
El evento que se realiza el primer día de cada año, esta vez, se llevó el doble de las críticas por la escena en la que se personificaba a menores migrantes en las llamadas “jaulas” que simulaban las de un centro de detención en Texas.
Los demócratas en el Senado denunciaron que la actividad cruzó la línea al convertirse en uno de “mal gusto”.
“Está bien –incluso saludable- burlarse de politicos, ideologías y celebridades, pero la sátira es mejor cuando es motivada por los prominentes y los poderosos; burlas sobre menores en jaulas y la crisis humanitaria en la frontera son simplemente un golpe bajo”, indicó el caucus en una publicación de Facebook. “El tenor de estas representaciones es divisorio, mezquino y fuera de nuestros valores estatales”, sostuvieron.
La furia en redes era evidente.
“Esto es lo que esta gente que participa y se ríe piensa que es gracioso. Deshumanizar a los otros y vestirse de estereotipos racistas”,opinó Lilly Martínez por Facebook.
