La muerte de dos recién nacidos, al parecer por descuido de su madre, tiene escandalizada a la comunidad de West Melbourne, Florida.
La Policía respondió a una llamada el domingo al medio día en la residencia de Rachael Lynn Thomas, de 30 años.
Cuando llegaron al lugar encontraron una escena de película de terror: un bebé recién nacido frío y cuya piel se tornaba azul, sangre por todo el baño y una mujer que decía había dado a luz en el inodoro y que «no sabía que estaba embarazada», según el record de arresto revelado por el noticiero local News 6.
El bebé fue trasladado de inmediato a un hospital cercano, en donde fue declarado muerto a las 12:40 de ese día.
Pero el hallazgo de las autoridades no terminó allí: encontraron rastros de sangre en la bañera, en la cocina y en unas tijeras que ya parecían haber sido limpiadas.
Al revisar un contenedor de basura en el garaje de la vivienda, la Policía encontró una placenta y otro recién nacido sin vida escondidos en una bolsa plástica tapada con arena para gatos. El recién nacido tenía el cordón umbilical envuelto alrededor de su cuello y debajo de su brazo, según la policía de West Melbourne.
«¿Había otro [bebé]?», dijo la mujer cuando se le preguntó por el recién nacido hallado en el contenedor de basura. Luego dijo que tuvo dos bebés, pero ambos habrían muerto en el parto y que eso la asustó.
La mujer fue arrestada y acusada de negligencia infantil y alteración de evidencia, de acuerdo con documentos de la Policía. La mujer permanece detenida y un juez le impuso una fianza de $30,000.
Hasta el momento se desconocen las razones del fallecimiento de los recién nacidos.