El Hamas utiliza a los civiles de Gaza como escudos humanos colocando su infraestructura terrorista en medio de la población civil. Además, la infraestructura de energía del hospital, que debería ser utilizada para los pacientes atendidos ahí, se utiliza en paralelo para la infraestructura terrorista subterránea de la organización terrorista y sus líderes.
El portavoz de las FDI reveló durante una sesión informativa a los medios internacionales material de inteligencia del Servicio de Seguridad Nacional y las FDI: el cuartel general de la organización terrorista Hamás se encuentra debajo del hospital central de la ciudad de Gaza, el hospital «Al Shifa».
El portavoz de las FDI reveló una gran cantidad de información que demuestra que Hamás utiliza habitualmente, y en caso de emergencia, la infraestructura humanitaria en la Franja de Gaza para el beneficio de sus actividades terroristas, al tiempo que dispone del refugio humanitario para proteger a miembros de la organización terroristas y a sus líderes.
El cuartel principal de la organización en territorio gazatí es el Hospital Shifa, el centro de salud más grande de la Franja de Gaza, ubicado en el corazón de la ciudad de Gaza.
En ese nosocomio se encuentran varios complejos subterráneos utilizados por los líderes de la organización terrorista Hamás para dirigir sus actividades incluido un túnel que llega hasta el hospital y permite además, la entrada a la sede de Hamás sin pasar por el centro hospitalario. El ingreso a la sede subterránea se realiza desde varios túneles en la zona del hospital. También existe una entrada desde los departamentos de internación y tratamiento.
Asimismo, dentro de Al-Shifa hay un centro de control de seguridad interna de Hamás, que cuenta con un amplio personal de hombres armados tanto en situaciones de rutina como de emergencia, así como un cuartel general desde donde se dan instrucciones acerca del lanzamiento de cohetes y el manejo de las fuerzas. Allí también se almacenan armas y municiones.
El hospital cuenta con 1.500 camas y alrededor de 4.000 empleados que sirven de escudos humanos para los líderes de la organización terrorista. La infraestructura energética del hospital, que se supone debe ser utilizada para sus pacientes, es en realidad empleada al mismo tiempo por la infraestructura terrorista subterránea de la organización y sus cabecillas. Los líderes de Hamas utilizan esta cubierta, poniendo en peligro a la población civil. Esta organización terrorista también controla ahora los recursos energéticos existentes en la Franja y opta por desviarlos hacia sus requerimientos, a expensas de las necesidades de la población civil.