En este nuevo beneficio que están recibiendo los hondureños, el 60% del consumo exonerado de pago es absorbido por Finanzas y el otro 40% es distribuido en el resto de consumidores no residenciales.
«La clase media y las Mypimes ya no aguantan. No se le puede cargar a ellos la obligación de otros. Tengan más talento y busquen alternativas diferentes, cobrarle más al que siempre paga, no es solución», manifestó el diputado Sabas.