Estados Unidos no tiene intención de obligar al presidente de Siria, Bashar al-Assad, a dejar el poder, pero no duda de su renuncia, según lo ha afirmado este domingo Nikki Haley, embajadora estadounidense ante la ONU, en una entrevista con CBS.
«Creo que él [Al Assad] va a permanecer en el poder por ahora. Estados Unidos, ciertamente, no está intentando forzarlo a renunciar, pero no creemos que se vaya a quedar», dijo Haley. «No hay forma de que el pueblo sirio lo permita. No hay forma de que los iraníes y los rusos piensen que tenerlo allí sea algo bueno. Así que creo que será cuestión de tiempo que se vaya», dijo.