El suicidio es un problema nacional en Estados Unidos. Es la décima causa de muerte en el país y cobra más de 32,000 vidas al año. De acuerdo con el Instituto Nacional de la Salud Mental, ocurre con mayor frecuencia en personas de entre 15 y 24 años o mayores de 60.
En vista de que se trata ya de un problema de salud pública, los Centros para el Control y la Prevención de Enfermedades (CDC) realizaron una investigación en torno a los trabajos con mayor índice de suicidios en Estados Unidos.
Analizaron los datos de 17 estados participantes en el Sistema Nacional de Informes de Muertes Violentas entre 2012 y 2015. Luego de examinar el suicidio de 22,053 estadounidenses en edad productiva, señalaron las ocupaciones donde más personas se han quitado la vida.
Entre los hombres, sólo en 2015 el campo de la construcción y la extracción, donde se incluyen oficios como carpinteros, mineros y electricistas, presentó las tasas más altas de suicidio con poco más de 53 suicidios por cada 100,000 trabajadores. Entre las mujeres, la mayor tasa de suicidio en el mismo periodo ocurrió en el campo de las artes, el diseño, el entretenimiento, los deportes y los medios de comunicación, con poco más de 15 muertes por cada 100,000 trabajadores.
En el periodo completo de estudio, de 2012 a 2015, entre los varones los trabajadores de artes, diseño, entretenimiento, deportes y medios de comunicación experimentaron el mayor aumento de suicidios con un 47 por ciento. El segundo mayor incremento estuvo entre quienes trabajan en la preparación de alimentos, con 43 por ciento, seguido del campo de la instalación, el mantenimiento y la reparación, con 24 por ciento.
Entre las mujeres, el mayor incremento se presentó en el área de la preparación de alimentos y la prestación de servicios con un aumento de 54 por ciento. El segundo aumento más importante se presentó en el área de arte, diseño, entretenimiento, deportes y medios, con 34 por ciento, seguido del campo de apoyo a la salud, con 31 por ciento de aumento.
Según los CDC, los hombres tienen más probabilidades de morir por suicidio que las mujeres, pues utilizan métodos más letales como armas de fuego o asfixia; pero las mujeres son más propensas a intentar quitarse la vida, y lo intentan más a menudo por envenenamiento.
Tanto para hombres como para mujeres, el área de educación, capacitación y biblioteca, donde se encuentran ocupaciones como maestros, archivistas y profesores, presenta las tasas más bajas de suicidio.
Los investigadores señalaron que las causas del suicidio son multifactoriales y que aspectos como la inseguridad laboral y la falta de trabajo producen angustia psicológica que puede incidir en la decisión de quitarse la vida.
