El fiscal del condado de Hillsborough Andrew Warren anunció hoy que pedirá la pena de muerte para Howell Donaldson III, al que se acusa de haber matado a cuatro personas siguiendo un mismo patrón en Tampa (suroeste de Florida).
“La pena capital es para lo peor de lo peor, para crímenes que van más allá de un típico homicidio”, dijo Warren en una rueda de prensa en Tampa, según informaron medios locales.
El barrio Seminole Heights de Tampa fue el escenario de los cuatro asesinatos de los que se acusa a Donalson, de 24 años, ocurridos entre el 9 de octubre y el 14 de noviembre.
Las víctimas, que no tenían nada que ver entre sí, fueron asesinadas a tiros en las calles de ese barrio cerca de una misma parada de autobús cuando estaban solas y había oscurecido.
El 28 de noviembre Donaldson fue detenido gracias a una empleada del mismo restaurante McDonalds de Ybor, localidad de la periferia de Tampa, en el que el joven trabajaba.
Esa mujer entregó a la policía una bolsa con un arma de fuego que el ahora procesado tenía en el local de comidas y con la que, según se comprobó después, se hicieron los disparos que acabaron con la vida de Benjamin Mitchell, Monica Hoffa, Anthony Naiboa y Ronald Felton.
Donaldson se ha declarado no culpable de todos los cargos.
La próxima audiencia del caso está fijada para el 26 de enero, un día más tarde de la fecha inicialmente prevista.
Los padres de Donaldson, Rosita y Howell Donaldson Jr., están procesados por el fuero civil por negarse a responder preguntas acerca de su hijo por parte de los fiscales.
