Tras la conmoción que el pasado lunes causó el incendio de la histórica catedral de Notre Dame de París, icono del cristianismo, los franceses debaten ahora sobre las modalidades de su reconstrucción. ¿Debe restaurarse el monumento de forma idéntica al original o sería mejor modernizarlo?, ¿qué técnicas deben utilizarse?.
El presidente de Francia, Emmanuel Macron, prometió dejar la catedral «aún más hermosa» y reconstruirla en cinco años,coincidiendo con la celebración de los Juegos Olímpicos de París en 2024.
«Tan solo es necesario escuchar a un profesional en restauración de monumentos históricos para entender que el objetivo de cinco años marcado para reconstruir Notre Dame, que supone rapidez y precipitación, es una locura», apunta Josée Pochat, periodista del diario Valeurs.
El incendio destruyó parcialmente la catedral: dos terceras partes del tejado y su famosa aguja. Aunque, en un primer momento, parecía que el fuego iba a destruir todo el edificio, los cimientos permanecieron intactos.
Las donaciones por parte de empresas y grandes fortunas francesas para renovar el emblemático edificio ya alcanzan los 850 millones de euros.
¿Idéntico a qué?
«¿Hay que reconstruir una aguja? ¿Idéntica? ¿Adaptarlas a las técnicas y desafíos de nuestro tiempo?», se interroga el primer ministro francés, Edouard Philippe, en un tuit con el que anuncia el lanzamiento del concurso.
