El expresidente George W. Bush está hospitalizado desde el domingo en la mañana. Fue internado en terapia intensiva al día siguiente del funeral de su esposa, Barbara Bush.
Horas después descubrieron que Bush padre contrajo una infección y está siendo atendido en el Hospital Metodista de Houston, confirmó el lunes su vocero, Jim McGrath.
El expresidente tiene 93 años y la infección produjo una sepsis que puede poner en peligro su vida, según informaron fuentes cercanas al político republicano.
El sábado asistió al funeral de su esposa, con quien llevaba 75 años de matrimonio. Él fue llevado en su silla de ruedas debido al Parkinson y convivió y hasta se tomó fotografías con expresidentes, sus esposas y la actual primera dama, Melania Trump, quien se mostró sonriente y generó un revuelo en redes sociales.
