Se inicia desconfinamiento gradual en centros educativos de Francia, que pretende suspender todas las restricciones para finales de junio y que tiene como primera etapa el retorno a clases presenciales de los alumnos del nivel superior y secundaria, además, el fin de las restricciones en los viajes interiores.
Para cumplir con el protocolo sanitario se reducirá la capacidad de alumnos con un 50% alternando los cursos presenciales y a distancia en los 15 departamentos franceses con una mayor circulación del virus, entre los que está incluido su capital Paris.
El primer ministro, Jean Castex, indicó: “Francia puede enorgullecerse de ser uno de los países del mundo en el que más han estado abiertos los centros escolares y queremos seguir así”.
Castex considera que los autotest (prueba que detecta la presencia de anticuerpos a través de una gota de sangre) son “una nueva arma” que se suma a la lucha del país contra la pandemia, como también a la aceleración de la campaña de vacunación, que hasta ahora solo estaba abierta a partir de los 55 años para los docentes.