El decreto para reunificar familias de inmigrantes ha provocado serios problemas de coordinación que han mantenido a padres de familia sin saber dónde quedaron sus hijos luego de que los separaron ante el programa de Cero Tolerancia del presidente Donald Trump.
Hay al menos 17 casos en McAllen, Texas en donde los padres no encuentran a sus hijos o el proceso de localización fue complicado, pues la administración de Donald Trump carece de un sistema para empadronar y dar seguimiento oficial y extrajudicial a cada trámite o caso. Lo que implica que fuera de los juzgados, fue difícil saber dónde estaban los niños que al ingresar solos o acompañados, los turnaron a centros de detención.
Los padres buscaron encontrar el proceso para rastrear a sus hijos que prácticamente fueron secuestrados en los centros de procesamiento fronterizo, reporta NBC.
“Había 77 personas y luego recibimos un aviso de la Patrulla Fronteriza de que 17 de esas personas estaban siendo retiradas de la lista y eran cabeza de familia”, comentó Marjorie A Meyers, defensora federal para el Distrito Sur de Texas.
Lo que no quedaba claro es si los padres serían deportados sin cargos penales o si los regresarían a tribunales por lo que enfrentaron la incertidumbre para reencontrarse con sus hijos.
Se estima que en McAllen hay 400 casos de familias separadas mediante procesos legales, pero de la reciente crisis se registraron 17 casos en NBC reportó ante la confusión en la interpretación del decreto que firmó Donald Trump como respuesta a la crisis diplomática y de popularidad que cuestionó la estrategia de Estados Unidos para resolver los retos migratorios.
