Agentes de la Dirección Nacional de Servicios Policiales Fronterizos, decomisaron 300.000 mascarillas que ingresaron al territorio hondureño de manera ilegal. Estas venían en diferentes cajas y, según las autoridades, no traían consigo la documentación requerida por la Agencia de Regulación Sanitaria.
Asimismo, señalan que las mascarillas no estaban declaradas, lo que incurre en una falta administrativa y de regulación. Dijeron que el ingreso de productos de bioseguridad debe estar avalado por el ente estatal.
Por lo anterior, los funcionarios de DNSPF, trasladaron todas las cajas conteniendo el material de bioseguridad como evidencia para continuar el proceso conforme a ley corresponde.