En algunos países, puede ser normal que los hijos adultos sigan viviendo con sus padres, incluso estando casados y con hijos propios. Pero no en Estados Unidos.
Mark y Christina Rotondo, de la ciudad de Camillus, en Nueva York, decidieron llevar a corte a su único hijo Michael, de 30 años, para exigirle que se mude de la casa familiar y obtenga finalmente un trabajo, reportaron varios medios nacionales.
Durante una audiencia de 30 minutos realizada la tarde del martes, Michael pidió que se le diera un lapso de seis meses para mudarse, lo que fue considerado como “excesivo” por el juez Donald Greenwood.
Según USA Today, el juez intentó que ambas partes llegaran a un acuerdo pero cuando el hijo se negó a hablarle a los padres, entonces Greenwood emitió su veredicto: Michael, ha llegado el momento de independizarse.