El presidente de EE.UU., Donald Trump, a través de una carta dirigida este 19 de noviembre al Congreso, ha informado de que el país está desplegando en Arabia Saudita fuerzas adicionales, incluyendo tropas, radares y sistemas de defensa antiaérea para contrarrestar una amenaza potencial de Irán.
En su escrito el presidente ha hecho una referencia a su anterior carta del 22 de julio de 2019, en la cual informaba sobre el despliegue de las Fuerzas Armadas de EE.UU. en Oriente Medio; una medida que fue tomada, según Trump, con el objetivo de «proteger los intereses de EE.UU. y mejorar la protección de la fuerza en la región contra la acción hostil de Irán y sus fuerzas de poder».
En este sentido, el mandatario estadounidense acusó a la República Islámica de «seguir amenazando la seguridad de la región» y del ataque de las instalaciones de la petrolera estatal saudita el pasado 14 de septiembre de 2019, algo que Teherán niega decisivamente.
«Para asegurar a nuestros socios, disuadir aún más el comportamiento provocador iraní y reforzar las capacidades defensivas regionales, se ordenó el despliegue de las Fuerzas Armadas de EE.UU. en Oriente Medio», reza la carta presidencial.
La misiva precisa que «las fuerzas adicionales, a las que se ordenó desplegarse en el Reino de Arabia Saudita, incluyen radares y sistemas de misiles para mejorar las defensas contra las amenazas aéreas y de misiles en la región, un ala expedicionaria aérea para apoyar la operación de aviones de combate de EE.UU. desde el Reino de Arabia Saudita, y dos escuadrones de combate».
El presidente ha señalado en la carta que la primera parte de estas fuerzas adicionales ya ha llegado a Arabia Saudita, y las fuerzas restantes llegarán en las próximas semanas.
«Con estas fuerzas adicionales, el número total de personal de las Fuerzas Armadas de EE.UU. en el Reino de Arabia Saudita será de aproximadamente de 3.000», ha especificado Trump, agregando que «este personal permanecerá desplegado mientras se requiera su presencia para cumplir con las misiones descritas anteriormente».
«He tomado esta medida de acuerdo con mi responsabilidad de proteger a los ciudadanos de EE.UU. en el país y en el extranjero y en defensa de los intereses de la seguridad nacional y la política exterior de EE.UU., de conformidad con mi autoridad constitucional para dirigir las relaciones exteriores de EE.UU. y como comandante en jefe y jefe ejecutivo», ha explicado el mandatario.
Además, el presidente ha añadido que ha proporcionado este informe como parte de sus «esfuerzos para mantener informado al Congreso, de conformidad con la Resolución de Poderes de Guerra».
