Usain Bolt corrió con poco aire y tomó champagne flotando sobre su espalda mientras disfrutaba condiciones de gravedad cero en la parte trasera de un avión.
El ocho veces campeón olímpico sonreía mientras experimentaba ingravidez en un avión modificado, usado normalmente para investigación científica, que en esta ocasión se utilizó para mostrar una botella de champagne que les permitirá a los astronautas beber burbujas en el espacio.
La botella fue diseñada por el fabricante Mumm. Con el tiempo, la compañía espera capitalizar el advenimiento del turismo espacial.
Multimillonarios como Jeff Bezos, fundador de Amazon Inc; Richard Branson; y el presidente ejecutivo de Tesla, Elon Musk, están envueltos en una carrera por enviar a turistas ricos al espacio suborbital, un lugar lo suficientemente alto como para ver la curvatura del planeta.
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