Investigadores de la República de Bashkortostán (Rusia) van a imputar a un hombre de 30 años el asesinato de su amante embarazada, un crimen que habría cometido con el fin de ocultar el adulterio a su esposa también gestante.
El acusado, residente de la ciudad de Ufá, fue arrestado después de que los familiares de la fallecida denunciaron su desaparición, en diciembre de 2017.
«Al principio, el sospechoso negaba que hubiera visto a la víctima el día que desapareció» pero, «ante la presión de las pruebas recogidas, confesó al asesinato y mostró dónde había ocultado el cuerpo», según han comunicado las autoridades de esa región rusa e informa RIA Novosti.
En el curso de las pesquisas posteriores, el homicida cambió su testimonio y aseveró que la víctima sufrió problemas respiratorios tras consumir drogas y él habría tratado de ayudarle a respirar realizando cortes en su cuello que le habrían provocado la muerte.
«De esta manera, el acusado ha admitido su culpabilidad de asesinato por negligencia, aunque la investigación ha recogido suficientes pruebas sobre el carácter premeditado del asesinato de la madre de un bebé no nacido», detalla ese texto.
