La Constitución de la República de Honduras tipifica los delitos de traición a la patria, sancionando a aquellos que menoscaban la integridad nacional, la soberanía y la unidad del Estado. Estas acciones, que intentan someter al país a otro Estado, son inaceptables y están claramente definidas como delitos en el Código Penal hondureño.
El artículo 555 del Código Penal establece penas de 15 a 20 años de prisión para aquellas personas que atenten contra la seguridad nacional, incluyendo aquellos que expresen opiniones favorables a estas acciones. En este contexto, las recientes declaraciones y videos de Mario Rivera, que han sido ampliamente difundidos en redes sociales, han generado preocupación y llamados a la acción.
Un analista ha expresado que las instituciones competentes deben presentar una denuncia formal, ya que estas declaraciones alteran el orden nacional y sugieren que Honduras debe someterse a otro Estado. Esto va en contra de lo establecido en la Constitución, que declara a Honduras como un Estado soberano e independiente.
El analista también destacó que, aunque existe un sector conservador y codependiente de Estados Unidos, la mayoría de la ciudadanía hondureña entiende la importancia de mantener relaciones bilaterales con diversos países basadas en la cooperación mutua. Esta postura es fundamental para preservar la soberanía y los intereses nacionales.
Es crucial que las autoridades tomen cartas en el asunto y actúen para proteger la integridad y la soberanía de Honduras. Las declaraciones y opiniones que atenten contra estos principios deben ser abordadas con firmeza para garantizar el respeto y cumplimiento de la Constitución.