El debate en el Congreso Nacional de Honduras ha alcanzado un punto crítico, con fuertes acusaciones hacia la oposición. Se ha señalado una «intención malsana» por parte de sectores opositores de bloquear la ejecución de un presupuesto destinado a la justicia social para el pueblo hondureño. La discusión se centró en 500 millones de lempiras, y se ha convocado una reunión en la Secretaría de Educación para abordar el reajuste salarial del magisterio.
El gobierno ha expresado su preocupación por la politización del tema, y se ha comprometido a implementar un reajuste retroactivo a partir del mes de enero. Sin embargo, piden al magisterio que evite la polémica y las críticas hacia el gobierno, recordando las dificultades similares del año pasado y culpando a la oposición por obstaculizar el proceso.
El diputado que habló sobre el tema criticó a la oposición por adornar sus argumentos y se opuso a las posturas de los profesores afiliados a los partidos de oposición. También hizo un llamado a continuar legislando para aprobar leyes que promuevan la justicia social y responder a las necesidades del pueblo hondureño.
Se espera que la reunión en Tegucigalpa con la dirigencia magisterial aporte soluciones a las controversias actuales y permita avanzar en la implementación de políticas de justicia social. El gobierno reafirma su compromiso de cumplir con los ajustes salariales y mejorar las condiciones del servicio civil y el magisterio, pese a la resistencia que pueda encontrar en el camino legislativo.
