«Cómo resolver la crisis energética en Honduras» Yani Rosenthal y expertos liberales

El presidente del Consejo Central Ejecutivo del Partido Liberal de Honduras, Yani Rosenthal con ayuda de varios expertos liberales en temas energéticos detalla en un comunicado algunas soluciones para este problema.

El problema es tan grande que no se puede resolver con una sola solución. La ASJ estimó que el país perdió 900 millones de lempiras por falta de energía tan solo en el mes de mayo. En el tema energético, se requieren soluciones de corto, mediano y largo plazo.

A corto plazo, para reducir los apagones, las mejores propuestas que hemos conocido son:

1.       Autorizar a las empresas privadas que tienen generadores de respaldo o emergencia (gensets) para que los utilicen a diario con el objetivo que se disminuya este consumo de la oferta con que cuenta la ENEE. Se estima que existen entre 80 y 100 MegaWatts (MW) de capacidad. Esta solución ya se utilizó exitosamente en la crisis de 1995 y en aquel momento la ENEE les devolvió a los participantes en este programa 1 kw-hr por cada kw-hr generado, reconociéndoles también el diferencial de costo, pero también pagado con energía. Esta solución requiere únicamente que se instale un medidor en cada empresa que cuenta con este tipo de generadores para medir cuanto generaron y pagarles la energía cuando termine la crisis. Para aquellas empresas que no tienen generadores de respaldo y desean instalarlos para participar el gobierno debe agilizar los permisos ambientales para instalación de tanques de combustible y otros permisos complejos.

2.       Existen más de 200 MW de potencia de paneles solares que las empresas privadas han instalado en sus techos. Esas empresas no consumen esa energía todos los días y a toda hora. Hay tramos cortos de tiempo durante la semana de trabajo cuando están ociosos y tramos más largos los fines de semana. La ENEE puede instalar contadores “reversibles” en estas empresas y comprarles esa energía sobrante, pagándola también con energía una vez que se supere la crisis.

3.       Hace mucho tiempo se discute en Honduras la implementación de una tarifa horaria. En el 2006 se diseñó una, pero la oposición del sindicato y la administración de la ENEE en aquel tiempo impidió que se implementara. Este mecanismo es utilizado en muchos países y permite tarifas más bajas en horas de la noche y los fines de semana para incentivar el uso de energía en esas horas con el objetivo de bajar los picos de consumo en horas diurnas.

4.       El año pasado, cuando se reformó la Ley de la Industria Energética, se aumentó mucho el piso de consumo mínimo requerido para ser considerado un gran consumidor, siendo el nuevo piso de 5 MW. Muy pocos consumidores en Honduras consumen esa cantidad. Esto causó que muchas empresas que compraban directamente a generadores perdieron la capacidad de comprar de esa forma. Esa reforma debería eliminarse hasta que termine la crisis para permitir más transacciones privadas que descargan la demanda en el sistema de la ENEE.

5.       La eliminación de todos los fideicomisos el año pasado incluyó los de distribución y transmisión de energía. Esto ocasionó que los fondos de la ENEE van ahora a una cuenta única de la Tesorería General de la Republica. Por ser un ente autónomo, que no es parte del gobierno central, la obligación constitucional que establece la cuenta única no aplica a la ENEE. Es mejor que la ENEE cuente con su propia tesorería y maneje su propio flujo de caja para ser más eficiente. Esto le permitirá ser más eficiente en los pagos y ahorrarse los altos costos por intereses moratorios en que incurre actualmente por los retrasos en sus pagos. También le permitirá más agilidad y autonomía en la toma de decisiones.

6.       La ley también establece que la ENEE tiene que generar el 51% de la energía. Pero esto no es posible porque la ENEE no tiene los recursos para hacer las inversiones necesarias. Es mejor eliminar ese requisito para que el mercado de energía sea más flexible.

7.       Finalmente, la ENEE puede hacer una licitación rápidamente en el Mercado de Energía Regional (MER) para comprar más energía en otros países. Simultáneamente tendrá que asegurar los derechos de transmisión en las líneas SIEPAC para transmitir esa energía.

8.       El atraso en la publicación de los estados financieros de la ENEE debe corregirse. Los últimos estados financieros publicados en la página de transparencia de la ENEE en el IAIP son los correspondientes al mes de marzo 2023. Es imposible para los administradores de la ENEE tomar decisiones adecuadas sin información oportuna.

 A mediano plazo también hemos escuchado muy buenas soluciones de los liberales con quien he conversado, siendo estas las más baratas, efectivas y sencillas:

1.  Se estima que en Honduras hay un aproximado de 585 mil lámparas de alumbrado público. De estas, 75 mil han sido convertidas a focos LED. Convertir el resto reduciría el consumo en unos 40 MW a nivel nacional. Es apenas un 2% del consumo máximo actual, pero ayuda a resolver el problema.

2. En la última crisis energética la ENEE recurrió a alquilar generadores pequeños de 1 a 5 MW que instaló directamente en las subestaciones más cargadas. Estos generadores ayudaron a reducir la carga sobre la subestación y las líneas de transmisión. El costo de generar con ellas es sumamente alto, pero es una solución temporal que ayuda a reducir los cortes y apagones que tanto agobian a la población.

3. La ENEE ha estado considerando alquilar una barcaza con generadores más grandes para tener más capacidad de generación. Esta idea es menos buena que la de instalar pequeños generadores porque no ayuda a descargar las líneas de transmisión y las subestaciones.

Finalmente, discutimos las soluciones a largo plazo para resolver de una vez por todas la crisis. Interesantemente, muchas de las mejores soluciones ya están plasmadas en la Ley de la Industria Eléctrica vigente. Por ejemplo:

1. La ENEE debe hacer las licitaciones para suministro de energía con 5 años de anticipación, tal como lo establece la Ley de la Industria Eléctrica. Guatemala utiliza ese plazo y actualmente se encuentra licitando la energía que comprara en el 2028. Esta planificación garantiza que no habrá escasez de energía. Las licitaciones no deben preseleccionar la tecnología de generación que se usará, para permitir a los participantes que puedan seleccionar la tecnología de más bajo costo posible.

2. El ente Operador del Sistema (ODS) es un mecanismo mejor que el Centro Nacional de Despacho. La reforma que eliminó el ODS también eliminó la participación en las decisiones de participantes importantes en el mercado de energía. El ODS tenía representantes de los sectores de generación, transmisión, distribución y otros. El cambio al CND elimina los aportes de esos sectores, centralizando todo en la ENEE.

3. El problema más grande del sistema energético de Honduras es la inmensa pérdida de energía que tiene nuestro sistema. Actualmente las pérdidas en el sistema llegan al 34% según cifras oficiales, pero muchos expertos estiman que la cifra real es 39%. De estas, se estima que 15% son técnicas y 24% son robo. En países eficiente las perdidas técnicas llegan al 12% y el robo es 0%. Estas pérdidas de energía han ocasionado que la ENEE tenga un déficit financiero acumulado de 100 mil millones de lempiras. La solución implementada por el gobierno nacionalista fue contratar a la Empresa Energía de Honduras (EEH), con el fin de que redujeran las pérdidas al 15%, pero durante el periodo que esta empresa ha operado, las pérdidas más bien han subido. El nuevo gobierno creó el Programa Nacional de Reducción de Perdidas (PNRP), pero la politización del mismo está causando que sea ineficiente. Es necesario que los empleados del PNRP cuenten con conocimientos técnicos para que tengan la capacidad de efectivamente reducir las pérdidas en el sistema. Considerando el contrato de la EEH se vence en Agosto, es crítico que el PNRP esté funcionando bien antes de esa fecha y tener capacidad plena para dar mantenimiento a las líneas de distribución. Asimismo, es necesario tener mas transparencia en la gestión presupuestaria del PNRP y en el proceso de otorgamiento de contratos por parte de la ENEE y el PNRP.

La crisis energética es un problema que afecta toda la región centroaméricana. El resto de los países de la región han reducido sus ventas de energía en el MER para conservar sus recursos. El Salvador ha suspendido la operación de 3 de sus hidroeléctricas. Guatemala y Costa Rica han hecho lo propio. Todo esto con el fin de conservar el agua de sus embalses.

La ENEE compró hasta 150 MW diarios en el MER en el 2022 en el mercado de oportunidad o mercado spot. El año pasado debió licitar energía firme en el MER y reservado los derechos de transmisión. No se hizo y ahora la ENEE está gastando el agua de sus embalses. Actualmente es muy caro comprar energía spot en el MER porque los precios están a 43 a 45 centavos de dólar por kw-hr. De continuar la situación anual de la ENEE, su flujo de caja empeorará y tendrá más dificultades para pagar sus deudas.

Las condiciones climáticas actuales han complicado aún más la situación. Las altas temperaturas ocasionan que la generación eólica no opere. La falta de lluvias ocasiona que las represas de paso o filo de agua reduzcan su capacidad de generación. La falta de capacidad de energía firme impide que la ENEE pueda sustituir la ausencia de estas dos fuentes de generación. Esto pone a la ENEE, SERNA y el propio gobierno en una situación difícil, entre la espada y la pared, por los compromisos adquiridos en el COP 27 de reducir sus emisiones de CO2 y ante la realidad de que no cuenta con suficientes recursos hídricos y eólicos para cumplir con esos compromisos.

El Partido Liberal si cuenta con equipos capaces y experimentados que pueden resolver los grandes problemas de nuestro país. Es un partido de mujeres y hombres honestos y capaces y con una doctrina, ideas y valores que son la mejor solución para sacar a Honduras de la pobreza y el atraso.

Ante esta compleja crisis, es conveniente recordar la lección que mi padre, Jaime Rosenthal Oliva me enseño: Cuando un problema es muy grande o complejo, es mejor cortarlo en pedazos pequeños y resolver individualmente cada uno de ellos. Me enseño que, así como es imposible comerse un molde de pan sin cortarlo en tajadas, es imposible resolver un problema inmenso con una sola solución.