Varios autobuses con migrantes llegaron a Estados Unidos cerca de la residencia de la vicepresidenta estadounidense, Kamala Harris, en la ciudad de Washington.
Los indocumentados, que arribaron a temperatura bajo cero, fueron atendidos por integrantes de varias organizaciones sociales y, posterior a ello, trasladados a una iglesia para poder refugiarse.
«Parecía que tenían que llamar a familiares o a alguien para que viniera a recogerlos, pero estaban ahí fuera, tiritando con mantas», afirmaron las autoridades estadounidenses.
Los migrantes, procedentes de Ecuador, Cuba, Nicaragua, Venezuela, Colombia y Perú, llegaron en medio de la fuerte tormenta que azota a Estados Unidos que hasta el momento ha dejado 34 muertos.
Hasta el momento se desconoce quién es el responsable de enviar a los migrantes al Observatorio Naval, sin embargo, se cree que pudo haber sido obra del gobernador de Texas.
Desde el mes de abril, Greg Abbott envió decenas de autobuses con indocumentados a estados gobernados por demócratas en protesta contra la política migratoria del presidente de Estados Unidos, Joe Biden.
Cabe mencionar que varios estados en su mayoría gobernados por conservadores consiguieron aplazar el levantamiento del Título 42 que permite expulsar a las personas que cruzan la frontera de manera irregular.
