El joven futbolista coreano Lee Seung-mo fue protagonista de una dolorosa lesión mientras disputaba un partido por la jornada 36 de la K League de Corea del Sur contra el Daejeon Citizen. El defensor fue a luchar por un balón en lo alto y perdió la estabilidad, cayendo con todo el peso del cuerpo sobre su cuello.
La imagen impactó a todos los presentes en el Estadio Mundialista de Daejeon, desde los espectadores hasta los propios futbolistas y asistentes, quienes al ver la caída corrieron rápidamente para socorrerlo. El jugador está fuera de peligro pero deberá pasar dos semanas en el hospital.
El jugador estrella del Gwangju FC no recuerda nada después de aquel salto. Una vez en la clínica, los médicos informaron que el futbolista de 20 años tenía tres vertebras cervicales rotas y un dedo de la mano izquierda fracturado.
«Solo recuerda haber saltado a cabecear y luego perdió la memoria hasta que llegó a la sala de emergencias. Recobró el conocimiento después de llegar al Hospital Yuseong-Sun», informó el portavoz del club.