Al cabo del día, nuestros ojos han estado muchas horas mirando pantallas; la del móvil, la del ordenador, la tableta o el ebook. Ocurre especialmente entre los más ‘conectados’, los más jóvenes. Tanto que las nuevas tecnologías están provocando un aumento de la miopía en jóvenes.
Los principales síntomas que suelen aparecer por este uso indebido son cansancio, ardor de ojos, sequedad, picor o parpadeo constante. Además, la visión se vuelve borrosa, tanto de lejos como de cerca, hay dolor de espalda, de cuello, de cabeza e, incluso, se pueden producir cuadros de ansiedad.
En sentido contrario, a favor de nuestros ojos, un estudio de la Universidad de Cambridge (Reino Unido) ha demostrado que por cada hora a la semana que un niño pasa al aire libre se reduce en un 2% el riesgo de padecer miopía.
Según la vocal de optometría pediátrica del CNOO, Isabel Sánchez, «el uso de móviles, tabletas, ordenadores o libros electrónico genera síndrome de fatiga visual. Esto se produce por la radiación que emiten los aparatos, porque se enfoca directamente sobre una fuente de luz y produce fatiga».
En este sentido, la experta ha alertado de que la sociedad no está realmente concienciada de que estos síntomas llevan aparejados la presencia de alteraciones visuales, por lo que ha destacado la necesidad de que aumenten las campañas de prevención y de que los padres observen a su hijos con el fin de evitar estos problemas.
