Tegucigalpa. – En una operación regional donde participa la Fiscalía Especial de la Niñez, la Dirección Policial de Investigaciones (DPI) y la Unidad Transnacional de Investigación Criminal (UTIC), se realizan allanamientos en Ocotepeque y Choluteca para desarticular una peligrosa banda dedicada al Tráfico Ilícito de Personas que operaba desde América del Sur, toda Centroamérica, México y los Estados Unidos.
De acuerdo a las diligencias investigativas, esta estructura criminal operaba trayendo personas desde otros continentes, a quienes cobraba hasta 40 mil dólares por dejarlos de forma indocumentada en Norteamérica. En Honduras utilizaban transporte público y varios hoteles como parte de la red de criminalidad organizada dedicada a estos ilícitos, en donde de acuerdo a investigaciones participaban dos miembros activos de la Policía de Frontera que ya fueron capturados, ellos son Nelson Ordóñez García y Norlin Vásquez Suazo junto a los ciudadanos Jorge Roberto Moreira, Rómulo Ismael Zepeda, Edith Ester Hernández y Oscar Saúl Chacón.
Como parte de los allanamientos se hizo inspección a varios hoteles de Choluteca y Ocotepeque, empresas de transporte interurbano y viviendas en donde se encontraron más de 50 migrantes de diferentes naciones los que ya fueron puestos a disposición de las autoridades de Migración.
La Operación Mesoamérica, coordinada por las agencias de investigación de los Estados Unidos y de cada uno de los países mencionados, venía haciendo labores de seguimiento y escuchas telefónicas desde hace seis meses y de acuerdo a informes, esta estructura tenía como cabecilla a una mujer conocida como Martha Luz López quien fue capturada en Guatemala. El modo de operar consistía en traer ciudadanos de países como Etiopia, Congo, Bangladesh y Eritrea, los ingresaban mayormente por Brasil y luego continuaban su ruta vía terrestre hasta Norteamérica.
