Durante el compromiso se notó el dominio del equipo vencedor, ya que los tunecinos se quedaron con un hombre menos, tras la expulsión en el minuto 42 de Dylan Bronn, uno de sus defensas centrales.
Sin embargo, el juego entre estos dos equipos tomó otro tinte entre el público e incluso en redes sociales, ya que en el minuto 19, cuando Richarlison celebró su único gol del encuentro le arrojaron un plátano, acto considerado como racista.
Varios usuarios de redes sociales se han manifestado con mensajes en contra de este tipo de actos.
El plátano lanzado desde las gradas del Parque de los Príncipes en Francia no fue el único acontecimiento antideportivo del compromiso, pues durante todo el encuentro se evidenciaba como los aficionados de la selección rival apuntaban con varios láseres a jugadores como Vinícius Jr., Neymar, Raphinha, entre otros astros brasileños.
Inmediatamente, la Confederación Brasileña de Fútbol (CBF) no se hizo esperar y se pronunció mediante sus redes sociales.